Tengo una queja

Nunca termino de hacer las cosas porque nunca dejo de hacerlas. Es así como acumulo una gran cantidad de actividades que en algún momento desbordan y terminan pero para empezar otra vez desde otra perspectiva. También podría decir que no empiezo a hacer las cosas importantes, casi siempre son las que dejo para lo ultimo. Es un problema eso de no poder hacerlas, no poder terminarlas, no entender la importancia entre una y otra porque todo se transforma en un caos.

• No sé que sentido tiene eso que escribí, fue algo espontaneo. El día de hoy se mantuvo. Hay algunas cosas que no me ponen mal pero no sé porque piensan que si me hace mal, no digo que me pone feliz de la vida pero tampoco me hacen llorar ni me dejan pensando, no me siento mal pero pareciera que demuestro que sí. No tengo mucho más para contar, tengo varias tareas para hacer. Ah, hoy encontré mi antigua agenda, una que me regalo él para mis quince años, donde la llene de textos míos, de otros, canciones y quiero leerla para ver cual era mi pensamiento y que cambios hice ahora. Sin nada más para decir, me retiro a leer un texto sobre Perón.