Nuestra historia es como un cuento de princesas, no falta ningún personaje, tampoco faltan los obstáculos, los malos que quieren separarnos, las hadas que hacen los hechizos necesarios para demostrarnos que el amor puede más, todo lo que puedas imaginarte nuestra historia lo tiene. Pasamos por muchas cosas que nos unieron como así también nos separaron y nos lastimaron. En este momento de la historia, tenemos una pared entre nosotros que nos separa. Esa pared tiene un agujero por donde pasa una soga, sólo el contorno de la soga pasa por ese mínimo espacio. De una punta de la soga estoy yo tirando sin cansarme para recuperarte y hasta ver que esa soga no se termine yo voy a seguir y así poder encontrarte del otro lado. Pero no puedo frenarme sabiendo que delante nuestro esta esa pared y que por más que tire y tire no vas a pasar por ahí, no hay manera para que cruces esa pared. Tendría que soltar esa soga, ya es hora. No tengo que esperar a chocarme con esa pared para ver que estaba amarrado a algo que no tenía solución. Tengo que ser fuerte y soltarla, dejarla y buscar otras sogas, capaz me equivoque y elija una que no era para mí pero voy a poder dejarla y buscar otra hasta encontrar esa que haga que del otro lado este amarrado mi príncipe, ese que tanto busco.
Tengo que encontrar mi historia de princesas, pero no va a ser como las historias clásicas donde sufren por su amor perdido, esta vez no voy a sufrir por amor, voy a encontrarlo sin derramar una sola lágrima por dolor.
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