Mi primer día como estudiante universitaria ya paso. Fue raro. Nunca tuve que cambiarme de colegio, siempre estaba con los mismos compañeros por años; en el secundario cuando elegimos la modalidad hubo cambios, pero no fueron significativos, por lo menos no para mí. Y ahora estaba sola, buscando un aula y entrando a una clase donde no conocía a nadie, donde tampoco sabia con lo que me iba a encontrar y con miedo, y muchos pero muchos nervios. Mis profesores del secundario se encargaron de decirnos y hacernos pensar que el cbc es el holocausto moderno, que de ahí no sale vivo cualquiera. Que si el matar a alguien fuera legal, ellos lo harían (por lo menos es esa la experiencia que tuve en mi adorado colegio), nunca me sentí tan segura al decir que los profesores del secundario quieren que vos seas la que limpie el baño de su futura oficina. 

Fue todo totalmente diferente a lo que me dijeron (aclaro por posibles quejas: hasta ahora fue diferente, solo llevo un clase) los profesores son muy buena onda, se interesaron por nosotros, hasta una nos pregunto el nombre y porque queríamos seguir esa carrera.

Hoy tuve dos materias: Semiología y Biología. La primera, si tuviste una buena base de lengua, vas a poder arrancar bien, te explican todos los signos lingüísticos, a quién se le ocurrió y esas cosas. Hoy tuve la parte teórica. Mañana tengo el taller. Pienso que puedo hacer ahí, que cambia pero no se me ocurre. La profesora de la parte teórica nos recomendó que miremos una película: Moebius que ya estoy bajando del ares para luego mirarla. Tengo tiempo porque recién vuelvo a tenerla el viernes. En Biología, tengo dos profesores: una que es igual a mi ex preceptora y otra que tiene la pinta de parecerse a Andy de Graduados (Ah, si miro Graduados, es lo único que me atrapo entre tanto novela berreta) son muy didácticos para explicarnos, son graciosos, te dan intervalos para que no te explote la cabeza. Creo que no conté que tengo tres horas seguidas de esa materia. Nos dan muchos trabajos en grupo, eso me hizo conocer gente nueva con la que no tuve problemas. No me dieron una mala impresión. 

Mañana otra vez vuelvo a entrar a las siete de la mañana, pero me gusto este día, creo que no me molesta porque hasta ahora pudieron lograr que me incentivara. Así que a tener en cuenta: No creerle a los profesores que dicen que el cbc es algo malo. 

Tengo varias cosas que leer y me cuesta encontrar un lugar tranquilo. Me gusta leer sola, y siempre pasa alguien por acá, pero sera hasta encontrarle la vuelta supongo.

Y bueno, ya me dieron mis horarios. Me dieron los que quería en la sede que quería pero como soy yo de algo me tengo que quejar: "No me gustan las materias que me asignaron" como si las pudiera cambiar y no tenerlas nunca. Lo digo solo porque estoy nerviosa, porque le tengo miedo a lo que viene, a como serán los profesores, las materias, las notas, los examenes. Es una etapa nueva, y como todo lo nuevo me da miedo necesito mostrarme indiferente. 

Esta nueva etapa la elegí yo, acá nadie me dijo que siguiera Psicología, que siguiera en la uba, que elija a la mañana. Todo, todo (es tuyo si queres, ¿queres? con una sonrisa veras que fácil es, perdón tuve una regresión) fue una decisión mía, y ahora si me equivoco, va a ser muy difícil para mi tener la responsabilidad de empezar de nuevo, de aceptar que tuve una mala decisión. 

Pensaba que esta vez no tengo una opción B, que si quiero eso para mi. Veo que muchos se plantean que si les va mal, seguir otra cosa (en varios casos relacionado con lo primero que eligieron) y yo no, yo solo tengo una opción y nada más y si me va mal quiero hacerlo otra vez. Aunque también estoy insegura sobre ese pensamiento. 

Hice un lío importante, para simplificar: Quiero destacarme en esto que elegí, no quiero arrepentirme. 

Faltan exactamente dos días para que me den los horarios del cbc, faltan exactamente cinco días para empezarlo. Falta un día para que vuelva al curso de cosmetología. Faltan horas para ir al cine a ver: Amor por siempre con mi novio. Faltan tres días para ir a la fiesta de una compañera del colegio por el cumpleaños. Faltan siete días para ir a la Avant Premiere para ver: Un método Peligroso. Faltan horas para que me confirmen mis amigas si vamos al día nacional del Quilmes Rock (para ver a mi ídolo Charly).

Y por más que tenga todo agendado, programado puede pasar cualquier cosa antes de cada cosa que arregle. Me gustaría dejar de ser tan estructurada, pero no puedo no tener el control sobre algunas cosas.

 

Este fin de semana tuve en claro algo: Me cuesta tranquilizarme cuando hay algún cambio a ultimo momento, mi cabeza empieza a sacar conclusiones como: Ya nada se puede hacer; Todo esta perdido, etc. 

Todo eso paso mientras el tren que me iba a llevar a Retiro (y despues al Anfiteatro de Puerto Madero) tuvo unos inconvenientes y se corto el viaje en Martinez. Mi cabeza empezo a pensar que no iba a poder ir al recital, que iba a llegar tan tarde que no iba a poder encontrar lugar, que me iba a equivocar de colectivo y no iba a llegar, que me iban a lavar el cerebro unos aliens. A todo estos mis delirios iban afectando de a poco a mi novio que con tal de tranquilizarme me dijo: Hagamos lo que vos quieras. Y es así como yo no sabia que hacer ahora. Todo eso se soluciono en menos de cinco minutos. Pero mis deliros duraron casi media hora. 

Mi espiritu de compradora compulsiva, si bien sigue en pie, va disminuyendo. Estoy pensando más a la hora de comprar. "Te parece que lleve una lapicera" ya hasta las cosas escenciales las pongo en duda. Igualmente, ese pensamiento no impidio que me comprara más utiles para el curso y el cbc que en tres años del glorioso polimodal. Compre resaltadores como para que pueda resumir media Argentina. 

Esta es mi ultima semana de vacaciones, ya empiezan mis responsabilidades a las cuales les tengo un poco de miedo. Todos empiezan a decirme que "ahi vas a aprender lo que es estudiar" y yo pienso y para que me habran mandado a un colegio donde iba 9 horas por días si recien ahora voy a aprender. Si era por el doble titulo, tranquilos que todavía no lo encontre un uso a la tecnicatura. 

Para mañana no tengo muchos planes, tengo ganas de estar en la cama y leerme todo esos numeros de revistas viejas que tengo por ahi guardadas y hacer un hallazgo sobre algun cantante que hasta ahora nadie se dio cuenta. Supongo que para mi, mañana es el domingo deprimente del que todos hablan. 

Aunque no este bien pintado, bastante desprolijo, pintarlo me distrajo un poco. Deje de pensar que todo lo malo me pasa a mí. Es que en esos momentos donde la única opción que tengo es quedarme en mi casa sola, empiezo a pensar y a divagar en cosas que muchas veces no tienen sentido. 

Me gustaría ser mas segura, creo que primero me gustaría estar segura como para empezar y después ir aumentando esa seguridad. La inseguridad muchas veces no me dejar avanzar en las cosas que hago y eso varias veces me pone mal. 

Cambiando de temas, todavía no me dieron los horarios para la facultad, recién el viernes que viene los tengo y estoy tan ansiosa que me comería todo lo que tengo a mi alrededor, pero después me acuerdo que no puedo hacerlo por la infección. Tendría que comprarme algunos útiles, no se, una lapicera y cuaderno seguro, en algún lado tengo que tomar nota de lo que me dicten. Quiero hacerlo esta semana, además todavía tengo que comprar los materiales que me pidieron en el curso de cosmología y maquillaje que no pude hacerlo. Me gusta ir a las librerías y tocar todo, querer comprarme todo y pensar: Ya no sos una nena, deja de boludear. Me hace sentir bien, no se.

Hoy vi un documental que otro blog al que sigo recomendaba ver que me hizo pensar en muchos aspectos del mundo. En si, el documental habla sobre las mentiras de la religión cristiana, las guerras, los ataques terroristas y las crisis económicas (Sobre todo de Estados Unidos), por un momento me dieron ganas de no prender por un buen tiempo la televisión, y creo que lo voy a hacer. 

Mañana tengo un día largo, voy a ir al Anfiteatro de Puerto Madero para ver a Tan Bionica, me emociona como el primer recital cada vez que los voy a ver, no entiendo todavía porque. 

Seguramente vuelva a escribir sobre como la pase ayer, las fotos de todo lo que saque y esas cosas.

Es increíble como mi psiquis y mi cuerpo no se ponen de acuerdo para nada. Cuando empiezo a sentirme bien en el aspecto mental; físicamente empiezo a estar mal. Creo que nunca se van a poner de acuerdo.

Es como si me dijeran: "Tenes muchas ganas de hacer cosas, mejor te enfermamos". Seguramente este exagerando, pero me da una impotencia tener que ver como modificar las cosas que tenia planeadas. 

Hoy era la segunda clase en un curso que empecé sobre cosmología y maquillaje y no pude ir por varias razones, una de ellas es estar tan dopada con la medicación que me dieron. No quiero perderme las clases y lo estoy haciendo. 

Con esto de enfermarme también me vuelvo caótica al relacionarme con las personas, me molestan hasta las mínimas cosas. Pienso que todo se me viene abajo si no cumplo con lo que en mi cabeza planeo. Me enojo facilmente con todos. 

Pero bueno, mi plan a seguir es hacer todo el reposo que pueda, pintar algunos mandalas como para pensar en otra cosa, cumplir con la dieta, la medicación y poder ir el sábado al recital de Tan Bionica. 

Seguramente escriba bastante seguido por acá, no tengo muchas cosas para hacer.

Primero y principal tendría que sacar esos malos pensamientos de mi cabeza. Segundo, armarme un cronograma del año como para que por primera vez organzarme en mi vida. Me siento bien, estoy bien.